Cuidados Paliativos
El cuidado paliativo es un enfoque especializado en el tratamiento de personas con enfermedades graves o terminales, cuyo objetivo es mejorar la calidad de vida del paciente y su familia, proporcionando alivio del dolor y otros síntomas. Este tipo de atención se centra en el bienestar físico, emocional, social y espiritual del paciente, y se lleva a cabo en conjunto con otros tratamientos médicos, si es necesario.
A continuación, se presenta un plan de cuidado paliativo personalizado, que puede adaptarse a las necesidades y preferencias del paciente y su familia.
Lo que le ofrecemos a nuestros pacientes

Soluciones personalizadas
Proporcionamos soluciones personalizadas para satisfacer sus necesidades. Nuestro equipo trabaja con usted para garantizar los mejores resultados.

Soluciones ecológicas
La satisfacción de los pacientes es nuestra prioridad. Nuestro equipo de soporte siempre está dispuesto a ayudar para garantizar que no tenga problemas durante su experiencia.

Calidad y excelencia
Contamos con experiencia y conocemos a la perfección el sector, así que le proporcionaremos ideas y soluciones que harán que vaya un paso adelante.

Experiencia y conocimiento
Ofrecemos productos y servicios novedosos para que pueda solucionar sus obstáculos. Usamos la última tecnología para que pueda alcanzar sus mejoría.
Evaluación Inicial del Paciente
La primera fase del plan de cuidado paliativo consiste en una evaluación exhaustiva del paciente, que incluye:
Historia médica completa
Diagnóstico, tratamiento previo, comorbilidades, y pronóstico.
Evaluación de los síntomas:
Identificar síntomas físicos (dolor, dificultad respiratoria, náuseas, fatiga, etc.) y psicosociales (ansiedad, depresión, estrés).
Estado emocional y psicológico:
Evaluar el bienestar emocional del paciente y la familia.

Alivio del Dolor y Manejo de Síntomas
Manejo del dolor
El manejo del dolor y otros síntomas es una prioridad fundamental en el cuidado paliativo:
Uso de escalas de dolor (como la escala de 0 a 10) para determinar la intensidad y tipo de dolor.
Uso de analgésicos, que pueden incluir:
AINEs (antiinflamatorios no esteroides) para dolores leves a moderados.
Opioides (morfina, oxicodona, fentanilo) para dolores más intensos.
Adyuvantes (antidepresivos, anticonvulsivos) para el dolor neuropático.
Terapias complementarias: Acupuntura, masajes, fisioterapia o técnicas de relajación para el alivio del dolor.
Monitoreo constante: Ajustar el tratamiento según la respuesta del paciente y los efectos secundarios.
Dificultades respiratorias: Uso de oxígeno, broncodilatadores o esteroides para aliviar la disnea.
Náuseas y vómitos: Medicamentos antieméticos (como metoclopramida o ondansetrón).
Fatiga extrema: Estrategias de manejo energético y medicación para mejorar la calidad de vida.
Estreñimiento: Uso de laxantes y cambios en la dieta para aliviar el estreñimiento relacionado con los opioides o la inmovilidad.
Apoyo Emocional y Psicológico
El cuidado paliativo también abarca el apoyo emocional y psicológico para ayudar al paciente y su familia a enfrentar los desafíos de una enfermedad grave o terminal.
Psicoterapia:
Sesiones de apoyo psicológico para el paciente y la familia, que pueden incluir terapia cognitivo-conductual o terapia de aceptación y compromiso.
Asesoramiento espiritual:
Si es necesario, proporcionar acceso a consejeros espirituales o capellanes para apoyar las creencias y valores espirituales del paciente.
Grupos de apoyo:
Conectar al paciente y la familia con grupos de apoyo para compartir experiencias y obtener consejo emocional.
Técnicas de relajación:
Enseñar técnicas de respiración profunda, meditación o mindfulness para ayudar a reducir la ansiedad y el estrés.
Psicoterapia individual
La psicoterapia individual es una forma de tratamiento que implica sesiones uno a uno con un psicólogo o psicoterapeuta.
El apoyo emocional y psicológico
Es una parte esencial del cuidado integral, especialmente en situaciones de enfermedad grave, terminal o crónica.